Chinches (heterópteros)
Última edición el : 7/10/2023
Las chinches o heterópteros son insectos con piezas bucales mordedoras. La mayoría son ectoparásitos de plantas, pero algunos han evolucionado para depredar otros insectos o ectoparasitar animales vertebrados (hematofagia). Sus infestaciones, que eran muy frecuentes (casi omnipresentes) antes del uso masivo de pesticidas, han vuelto a aumentar en las dos últimas décadas.
Especies que parasitan al hombre
Familia Reducvid
Esta familia incluye chinches hematófagos en todos los estadios de desarrollo (triatominos) y chinches depredadores (reduvinos).
Los triatominos de América del Sur y Central tienen importancia médica: parasitan vertebrados, pueden picar a los humanos y transmitir un endoparásito (trypanosoma cruzi) responsable de la enfermedad de Chagas. Estas chinches son de color amarillo, rojo y negro, activas por la noche y se esconden en recovecos durante el día. Su picadura es indolora y dura unos minutos, tras los cuales emiten excrementos líquidos sobre la piel. Estos excrementos son ricos en tripanozomas, y el ser humano se infecta bien por contacto directo de estos excrementos con las mucosas, bien por rascado de las lesiones.
Familia de los cimícidos (cimex)
Esta familia incluye chinches hematófagas en todos los estadios de desarrollo, muy resistentes al ayuno, veloces, activas de noche, que se esconden en recovecos durante el día y capaces de parasitar a diversos vertebrados, incluido el hombre. Su picadura es indolora pero rápidamente pruriginosa. Cuando son muy numerosas, se percibe un olor nauseabundo.
Las chinches arquetípicas son las "chinches de la cama": Cimex lectularius (en países templados) y Cimex hemipterus (principalmente en países tropicales), insectos lenticulares (planos y redondeados), de color amarillo a marrón rojizo, tamaño adulto de 3 a 5 mm. No transmiten enfermedades.
Otras especies
Muchas otras especies de chinches pueden picar "accidentalmente" a los humanos. Sin embargo, carecen de importancia sanitaria o médica.
Métodos de infestación y epidemiología
Contrariamente a lo que suele pensarse, la infestación en sí no está vinculada a las condiciones de higiene.
La infestación puede ser activa (el insecto se desplaza por la noche para alimentarse y es atraído por el calor y el CO2, extendiéndose a las viviendas cercanas) o pasiva (si se aloja en una zona infestada, las chinches se esconderán en su equipaje y ropa). Los lugares muy concurridos (hoteles, cines, escuelas, guarderías, estaciones, aeropuertos, etc.) están especialmente expuestos.
Además, las casas con paredes de barro (más comunes en los países tropicales) ofrecen unas condiciones de vida especialmente favorables para las chinches.
La prevalencia de las chinches ha variado mucho a lo largo del tiempo. Sin embargo, eran prácticamente omnipresentes hasta el uso generalizado de insecticidas en la agricultura y el hogar tras la Segunda Guerra Mundial. Primero fue el DDT (al que las chinches se hicieron resistentes), luego los organofosforados, los carbamatos y los piretroides. En la segunda mitad del siglo XX, la prevalencia de chinches disminuyó drásticamente.
Sin embargo, la constatación de que los insecticidas son muy tóxicos para el ser humano ha llevado a la mayoría de los países, sobre todo occidentales, a restringir cada vez más su uso en las últimas décadas... lo que ha ido acompañado de un "retorno de las chinches".
Más recientemente, las olas de calor en todo el mundo como consecuencia del calentamiento global han favorecido la proliferación de chinches en los países templados en verano. Un aumento de la temperatura de 20 a 25°C durante unas semanas basta para duplicar su ciclo de reproducción. De forma más limitada, el calentamiento global también está favoreciendo la propagación progresiva de los triatominos y de la enfermedad de Chagas en América.
La proliferación de alquileres tipo "airbnb" en edificios residenciales, sobre todo en las grandes ciudades turísticas, es también un factor de propagación de las infestaciones.
Por último, el aumento de los viajes internacionales, en particular los viajes de norte a sur, desde la década de 1990 se ha atribuido a menudo como factor de esta reaparición. Sin embargo, esto sigue siendo sólo una hipótesis que no se ha confirmado, ya que las infestaciones siguen siendo principalmente el resultado de especies locales.
Clínica y diagnóstico
El diagnóstico se basa exclusivamente en la observación de las chinches en el lugar de la infestación y en el reconocimiento clínico de las lesiones cutáneas, cuyo aspecto no es muy específico. Las lesiones pueden adoptar diversos aspectos (máculas, bullas, hemorragias, urticaria papular), pero lo más frecuente es que sean pápulas eritematosas, discretamente edematosas y siempre muy pruriginosas. Suelen agruparse en filas o racimos.
En América del Sur y Central también pueden observarse los signos de la enfermedad de Chagas, transmitida por triatominos.
Tratamiento y erradicación
A excepción de la enfermedad de Chagas transmitida por triatominos, las picaduras de chinches no requieren ningún tratamiento. A veces se prescriben corticosteroides tópicos o antihistamínicos orales para las lesiones extensas y muy pruriginosas.
Sin embargo, erradicar las chinches de los hogares es difícil. Lo ideal es que lo lleve a cabo rápidamente (ya que el número de chinches y las zonas afectadas son todavía limitadas) una empresa especializada que utilice una combinación de métodos físicos y químicos. Las medidas "ligeras" (aspirar, lavar a alta temperatura la ropa y la ropa de cama, limpiar con vapor los colchones, etc.) suelen ser insuficientes y sólo deben recomendarse como "preparación" para la erradicación real. Los insecticidas sólo deben ser utilizados por una empresa especializada. La erradicación requiere al menos dos tratamientos a intervalos de +- 4 semanas.
Además, la erradicación debe llevarse a cabo en todas las viviendas afectadas (a menudo todo el edificio, a veces edificios vecinos), de lo contrario existe el riesgo de una rápida reinfestación por proximidad.
En la mayoría de los países, la erradicación es responsabilidad del propietario o propietarios, a quienes se cobran los costes.
Autor
Dr Shanan Khairi, MD
Bibliografía
Association française des enseignants de parasitologie et mycologie, Parasitologie - Mycologie, ANOFEL, 2002
Elston DM, Bedbugs, UpToDate, 2022
Perron S et al., Les punaises de lit, retour vers le futur, Institut National de Santé Publique du Quebec, janv 2010